Ese corto viaje hacia el baño tras hacer el amor que se convierte en una eternidad si te recorro con las ganas. Las mil y una paradas en el abismo entre el "te quiero" y el "soy tuyo, eternamente tuyo". El escondite que existe entre tu cuello y mi sonrisa. Tus maneras, mis manías, nuestros secretos en pareja.
Mientras te recorro a besos me voy asegurando de sellar nuestra alianza, nuestro seguro de por vida; mientras te arresto el alma, soy yo quien puede disfrutar de cada gesto, de cada gemido, de cada mirada mientras nos dejamos la piel.
Y eres tú quien me regala el placer y el tesoro de poder contarte secretos entre tus piernas mientras te quiero bajo las sábanas. Estoy enamorada de ti, de ti insaciable, de ti romántico, pero sobre todo, de ti y de mí.
Sabes que has conocido al amor de tu vida cuando convierte tus miedos en fantasía.